Demasiado
bonita para el nivel de la plaza fue la novillada que envió a Madrid Cesar
Rincón para inaugurar la feria de otoño 2015. Un encierro igualado en chico que
se ha lidiado bajo el denominador común del descaste y la falta de fuerza. Todo
un petardo que debe hacer pensar al gran maestro del toreo si verdaderamente le
merece la pena seguir criando este animal.
Lo de hoy fue más de Cárnicas “El
Torreón” que de Ganadería Brava.
La tarde
comenzó con el aguante en el ruedo de un inválido. El presidente Javier Cano
quiso ahorrar en sobreros y precipitó a Filiberto a una batalla sin rival.
Estuvo firme y dejó buenas sensaciones el de Calasparra, pero aquello era como
ir de marcha con tu abuela. Intención sin emoción. La espada sigue siendo un
punto en el que el de Calasparra debe poner mucho énfasis este invierno.
El cuarto fue
otro descastadísimo animal al que Filiberto se lo llevó a los medios en una
faena de mérito porque el novillero se sobrepuso de buenas maneras al tono
aburridor del novillo y al viento que le jugó alguna mala pasada. Dejó
Filiberto detalles sueltos de calidad y un ajuste muy mejorado. Pena que la
espada siga fallándole. Pese a el borrón de la tizona deja Filiberto ambiente
para volver a verlo en Madrid y si es posible que se anuncie con un ganado con
más gas.
Alejandro
Marcos también se las vio con un noble y anodino novillo segundo en el que sólo
pudo dejar impronta de sus buenas maneras y temple, y además, que también tiene
un problema con la espada.
El quinto fue
una raspa sin fuerza y el presidente no tuvo más remedio que devolverlo. En su
lugar salió un mansísimo sobrero de Dolores Rufino que debió ser condenado a banderillas
negras. Si alguien sabe dónde está el pañuelo rojo que avise. Desde luego en el
placo de Las Ventas han omitido esa parte del reglamento. El manso fue el que
más se dejó en la muleta y Alejandro Marcos navegó entre mil dudas por el pitón
derecho y sorprendió positivamente en una tanda de naturales que despertaron de
la siesta a más de uno. Pena la cosa se quedará en una tanda que luego
estropearía con una estocada atravesada y el descabello.
Joaquín
Galdós pasó inédito. Antes dos flojísimos ejemplares sus ganas se han tenido
que quedar para mejor ocasión.
Digno de
mención los pares de banderillas de Raúl Adrada al sexto de la tarde y la brega
de “Suso” al manso sobrero de Rufino, se llevaron las ovaciones de la tarde.
Ficha:
Plaza de
Toros de Madrid, Las Ventas. Jueves 1 de octubre. 1ª de la feria de otoño.
Novillos de
El Torreón, excesivamente chicos, mansos, flojos y asquerosamente deslucidos.
Un sobrero, 5º, de Dolores Rufino, manso.
Filiberto:
Silencio y Ovación con saludos con división.
Alejandro
Marcos: Silencio y Silencio.
Joaquín
Galdós: Silencio y Silencio.
Entrada: Dos
tercios de entrada.
Y mañana:
Toros de Puerto de San Lorenzo para: Diego Urdiales y López Simón.
Por Fran Pérez
@frantrapiotoros
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