En la desolación
de la tierra inerte ha caído una semilla. La pasión la cultiva y el corazón las
riega. Luego el esfuerzo y el trabajo, la hace germinar.
Si mis
desvelos y mis inquietudes taurinas, si mi trabajo y mis desengaños en este
mundo tan difícil y a la vez tan bonito, vale para que se den imágenes como
estas, soy feliz.
Soy feliz de
ser amante de esta fiesta de los toros. De decirlo sin complejos. De defenderla
del que la ataca desde el desconocimiento y del que la corrompe desde dentro.
Tú, el que me
lees, yo, tenemos la labor de no defraudar a los que vienen detrás. Debemos
mantener su derecho de poder elegir disfrutar de una fiesta con verdad, integra
y digna.
“Sembrar para
recoger” con un principio básico “Dejad que los niños se acerquen a mi”
@frantrapiotoros
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