No era día de
toros. Porque en el jolgorio típico de Pamplona sonaba el réquiem de Mozart. La
chica ye ye hoy no tenía el pelo colorado, ni las medias de color. La entrada
de Eurovisión sonó a sólo de violín y el silencio por un minuto en honor, de la
entrada de un nuevo ángel en el cielo.
Nubes Negras
de Pena en la cabeza de Curro Díaz. Es difícil ver y por tanto torear, cuando
la tormenta sigue descargando y pegando fuerte en tu mente. Tendrá el
reconocimiento de hacer algo que otros no hubieran hecho jamás. Ojalá pronto el
anticiclón de su corte y maestría pueda volver a embriagar de torería nuestras
almas destrozadas.
Los toros de
Pedraza de Yeltes, mastodónticos, fuera de tipo y con la casta apenada no
dieron juego. Tan sólo el tercero, de mejor son, propició las condiciones idóneas
como para olvidar lo negro y volver otra vez a la senda. Pero lo oscuro, ha
sido tan grande, tan gordo, tan injusto, tan inevitable, tan real que va a
costar encontrar otra vez el camino.
Juan del
Álamo no se entendió con él. Hoy, ningún torero se hubiera entendido con él. La
tormenta en la mente de Juan del Álamo no era tan cercana como la de Díaz, pero
es que esto duele hasta el que no es aficionado pero respeta. Hoy no es el día de
criticar y si de alabar al que se pone delante de un toro con estas circunstancias.
Fandiño sigue
perdido en la isla de toreros sin rumbo. Su anodina actuación no es flor de un
día. Fandiño está mal desde que toreó los seis toros en Madrid. Alguien le debería
decir ya que corte. Que pare y cambie de aires. Su carrera de esfuerzo y lucha
no se merece este epilogo. Fandiño está capacitado para volver a ser el que
era. Volver a aquellos inicios de garra para resurgir.
La pena sigue
y mañana Jandilla.
Ficha:
Plaza de
toros de Pamplona. 6ª de la Feria del Toro.
Toros de
Pedraza de Yeltes, deslucidos. El 3º se dejó más.
Curro Díaz:
silencio y silencio
Iván Fandiño:
silencio y silencio tras aviso
Juan del
Álamo: silencio y silencio tras dos avisos
Entrada:
Lleno
Y mañana:
Toros de Jandilla para: Diego Urdiales, Alejandro Talavante y Alberto López
Simón.
Por Fran
Pérez @frantrapiotoros
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