Miura, la
temida ganadería que veo aguada. Y me apeno. Siguen teniendo las dificultades
de siempre, pero ahora veo más animales defendiéndose por descaste y fuerza que
toros con poder defendiendo su casta y estirpe.
Una pena
porque Miura siempre será esa ganadería temida que nadie quiere ver. De hecho,
las figuras del toreo no quieren ni olerla. Pero me gustaría que no la
quisieran ver por su acometividad y casta, y no porque ellos la consideren
podrida.
La de hoy
deja mucho que desear y me duele escribir esto. Siempre seré de Miura pero no
se puede defender lo indefendible. A los cercados de Zahariche debe volver la
fuerza, porque un Miura sin fuerza es como un Bolt sin velocidad, o un Cristiano
Ronaldo sin Gol.
Tengo la
confianza de que eso volverá. Y que Eduardo y Antonio están trabajando ya en
ello. Espero que el cárdeno no tenga nada que ver. Lo que sí es verdad es que
se echa de menos la variedad de pelajes que siempre tuvo esta vacada. Ahora el
gris le ha dado más toreabilidad pero menos personalidad. Démosle un tiempo,
como le damos a los toreros que no andan bien.
Hoy, con el
pobre de mí, también se acaba esta sección con la que he querido cada tarde
ofrecerles un aspecto de la corrida y profundizar sobre él. El puyazo, como a
todos los picadores, cae en el sitio, trasero o en el costado. Sé que a veces
barreno, pero sólo es con intención de que este toro, nuestra fiesta, tenga el
mejor sentido posible.
En cada letra
que escribo me sale un recuerdo de Víctor Barrio. No soy fan del cantante, pero
un torero, desde el cielo, con su gloria y su grandeza me va a hacer cantar más
de una vez eso de ¡SOMOS LOS BARRIEROS! Por él, debemos seguir amando esta bendita
fiesta de la verdad y el riesgo, del triunfo y la tragedia, de la vida y de la
muerte. La fiesta del blanco y el azul, del rojo y el verde, del naranja…..
De indulto
ustedes, por seguirme cada noche, cada día, en su tiempo libre. Espero haberles
sacado una sonrisa, un cabreo, una lágrima o una certeza, si sacaron alguna
mentira, me la colaron y les pido disculpas por ello.
Quiero decir adiós,
pero no puedo. Escribirles e informarles me llena y así seguirá siendo. Gracias
por estar ahí detrás.
Seguimos con Trapío….
Fran Pérez
@frantrapiotoros
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