viernes, 5 de junio de 2015

COLOREAR A LOS GRISES (Madrid, crónica de la 28ª de la feria de San Isidro, 4 junio)

Toros grises, de juego como su capa. Dos toreros que colorearon la tarde, color torería y color emoción. Todo mezclado con dosis de firmeza y ganas.

Pincel fino, óleo y gracia en las muñecas de Diego Urdiales. Obras maestras de verónicas y una media de recibo. Y en la faena, una exposición de temple y valentía, ante el parado y peligroso primero. Suavidad y muletazos extraordinarios, uno por bajo candidato para anunciar ferias. Pena que la espada se cargara tan delicada obra. Pero la inspiración no terminó ahí. La media en el quite al tercero, candidata a la media de la feria. ¡Qué media de perfume! Si la da uno que yo se me, se cae el mundo. Pero aquí la ha dado Urdiales. El Clavel calladito y la afición, con la camisa partida. Papeles cambiados. Aleluya.

El cuarto fue el más soso de los de Adolfo. Un animal noble al que sacó una tanda inicial antes de que se parara del todo. Una tanda, pero una señora tanda. Todavía hay un tonto pintándole. Hoy ese tipo debió escuchar, el pumm  petardo. Remató, a este toro, con la estocada de la feria.

Lo peor es que ¿Cuándo volveremos a ver a Urdiales? Mirar los carteles de las ferias de junio y que se te caiga el alma a los pies. Ellos se lo pierden. Urdiales es pata negra, toreo de nochebuena. Lo vemos poco, pero lo saboreamos. Y si el palmero quiere Hacendado, que se lo coma.

Pincel Rubio, con mucha masa escrotal, de superación y suerte. Manuel Escribano ha pisado fuerte Madrid. Se fue a porta gayola en sus dos toros, uno flojo y deslucido no le permitió sacar su potencial. Y otro, emocionante y con peligro, que hizo relucir sus mejores virtudes y ver que tiene sitio en esta fiesta. No es Manuel torero de toros facilones y a la vista que la emoción del sexto toro lo ha elevado a los altares. Emoción en el tercio de banderillas, con varios instantes donde la pelea entre toro y torero, iba de igual a igual. Se le dejó llegar  muy cerca el sevillano y sacó de casta torera para poderle y estar por encima del toro, y para colmo dejar naturales de muy bella factura. Madrid se dio cuenta de la verdad, del corazón abierto y sincero de un torero, que hoy ha dicho en Madrid, este soy yo. Paseó Un Orejón de Ley al término de su actuación.

Castella anduvo con precauciones con el violento segundo y se topó con las nulas posibilidades del quinto. No fue su tarde, pero aún resuena su faena al de Alcurrucén. Lo que está claro es que no es torero de colorear a los grises.

Ficha:
Plaza de Toros de Madrid. Las Ventas. Jueves 4 de Junio. 28ª de abono San isidro
Toros de Adolfo Martín, complicados y deslucidos. El 6º con emoción.
Diego Urdiales: Ovación y Ovación
Sebastián Castella: Silencio y Silencio
Manuel Escribano: Silencio y Oreja
Entrada: Lleno de “No hay billetes”

Y mañana: Toros de Victorino Martín para: El Cid, único espada.

Por Fran Pérez @frantrapiotoros

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