¿Quien
te lo iba a decir Sole? Un petardo, un verdadero petardo. Así es
como debería acabar hoy el anuncio de la empresa de viajes que
patrocina la feria y las retransmisiones de San Isidro.
La
cara de felicidad de Sole sólo se puede achacar a las ganas que José
Garrido ha mostrado en la tarde de su confirmación. Lo peor de todo,
es que la pobre Sole, cuando llegan las figuras, sabe que la
felicidad de ser aficionado a los toros, sin palmas ni fanatismos,
esta cotizada.
El
Juli se ha empeñado en ir a Madrid de comoderas y lo esta sufriendo
en sus carnes. La bronca que recibió con el segundo de Alcurrucén
debe hacerle comprender que esta plaza lo espera con el compromiso de
una figura del toreo. No valen ni Alcurrucénes ni Jandillas, cuando
por la feria pasa otro tipo de toro con el que el aficionado esta
deseando ver a Julián. Además del poco compromiso, la actitud y
desgana fue palpable. Parece como si Julián sólo le tenga tomada la
medida a toros de Garcigrande, que curiosamente estaban de sobreros
hoy. Pasó inédito con el deslucido segundo dando un mitin de
becerrista con los aceros y con el quinto, sacó la manta pegapases
del aburrimiento y el desajuste que hace pensar de verdad, si estos
toreros merecen tener la temporada hecha antes de que empiece. Su
trasteo recibió un silencio de indiferencia que daña si de verdad
uno viene convencido a darlo todo en Madrid. Lamentablemente, las
plazas de provincia sucumbirán ante el destoreo. Si la clasificación
del fútbol se mueve temporada tras temporada, en esto del toreo
debería moverse también. Si fuera así, Julián sería torero de
media tabla.
Sole,
la del anuncio, sabe como tú y como yo, que la temporada de
Sebastián Castella esta siendo nefasta. Que no hay por donde coger
que este anunciado cuatro tardes en Madrid. Que el próximo lunes 30,
tal y como va su feria, las lanzas estarán en alto, porque no se
comprende su sitio en ese cartel cuando otros, marcaron por toreo,
más goles que él. Enchufe y veto al canto, hoy se encargo de darle
pases hasta las moscas de la plaza. De tanto pase alguno casi acabó
mareado. Un día le dirá alguien que esto va de torear, además el
lo sabe, cuando el hambre apretaba o cuando su carrera pasaba por un
bache importante. Ahora que otra vez nos creemos en la cumbre, vuelve
la vulgaridad. Así no Castella, así no. Y respetar al que paga,
también, que son los que te dan de comer. Si el siete protesta, en
su derecho esta.
El
inicio de faena al primer toro de José Garrido, con el que confirmó
alternativa fue delatador. Y es que José venia a por todas. Los
compases tuvieron emoción con el toreo de hinojos en el centro del
ruedo y la siguiente tanda de derechazos que caldearon el tendido. El
toreo se echó la muleta a la mano izquierda el toro bajó el
diapasón hasta apagarse por completo. Mató de entra desprendida y
dejó buen sabor de boca ante el respetable. Saludó una ovación.
Con el sexto, muy deslucido, se metió entre los pitones en una labor
en la que embistió y fue más bravo que el toro. Se cambiaron los
papeles y el torero estuvo como deben ser los toros, bravos y
encastados. El problema es que si hay un torero bravo y el toro es
débil y sin gracia, la cosa queda en una superioridad que en nada
ayuda a la fiesta.
Sole,
acabemos como tu anuncio. Es que la emoción da mucha vida. Y vida
necesita la fiesta.
Ficha:
Plaza
de Toros de Madrid, Las Ventas. Viernes 20 de Mayo. 14ª feria de San
Isidro.
Toros
de Alcurrucén, descastados y deslucidos.
El
Juli: Pitos y Silencio
Sebastián
Castella: Silencio y Silencio
José
Garrido: Ovación y Silencio
Entrada:
Lleno de “No hay billetes”
Y
mañana: Rejones. Toros de Capea para: Sergio Galán, Diego Ventura y
Leonardo Hernández.
Por
Fran Pérez @frantrapiotoros
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