HOY HE DECIDIDO DEJARLO...

Leo en el blog Banderillas Negras, de mis compañeros Milinko y Alcobendas, que cierto sector periodístico taurino español está de uñas con los blogs taurinos. Esos blogs que son los ojos de los aficionados en tiempos del antifaz. En los blogs los aficionados se encuentran la verdad, la visión sin alivio de lo que ha sucedido una tarde, lo que hay detrás de la información o la opinión respetable de los que creemos en una fiesta de los toros mejor.

Pero ahora quieren ir a por nosotros. Resulta que somos los que más dañamos la fiesta. Y todo porque no somos capaces de hacer palmas o limpiar chaquetas de los que ponen publicidad de su torero o de su evento pero somos valientes de defender al que paga. A ese que va a una plaza y se encuentra teatro cuando ha pagado por verdad. Y la verdad es demasiado cara.

Dentro de poco hará dos años que Trapío Toros cogió las riendas de aquel extinto Todo Toros que contaba con la venia de ustedes. Que rápido pasa el tiempo. Todo Toros se fue en un momento de flaqueza. No merecía la pena luchar por una fiesta donde no se cuida a la afición. Donde no sucedía nada, y donde invierno tras invierno las soluciones brillaban por su ausencia.

Pero luego pensé, si nadie defiende la fiesta, yo voy a intentar contar mi verdad de la fiesta. Y así, hace dos años nació este heredero natural de aquel blog del que me siento orgulloso.

Sé que no puedo gustar a todo el mundo. Esto de opinar va del “me encanta como escribes” al “te voy a partir las piernas”. Seguro que todos los compañeros blogueros saben de lo que les hablo. Imagino que le habrá pasado a todos. Pero para ser intrusos bien que nos leen. Más de lo que nosotros pensamos. Somos esos dañinos por naturaleza en caza y captura. Piden nuestros teléfonos para darnos el famoso toque o dar saludos a nuestros muertos. Envían a valientes mensajeros para tratar de echarte de sitios porque creen que les estorbas, avisándote de que si escribes de ellos te van a pegar siete ostias, te dejan en el  WhatsApp lindezas narcisistas que cuesta creer que salgan de un torero o llaman para que quiten tus artículos de cierta web. También los hay de los que llaman preguntado que si eso va por ellos o los que te dan las gracias, que las agradezco pero no hacen falta.

Hoy he decido dejarlo.

Dejarlo claro. Que seguiré defendiendo mis ideales. Que quiero seguir disfrutando de la grandeza del toro bravo y del torero que es capaz de ponerse delante, que diré lo que me gusta y lo que no me gusta sin tapujos, que guardaré cada amenaza para hacer uso de ella cuando yo lo crea conveniente, que seguiré defendiendo a la afición y denunciaré todas las tropelías que se hacen contra ella, y que quiero seguir formando parte de esa blogosfera taurina que unida le hacemos frente al sistema de amiguismo y compadreo establecido.

Y todo gracias a ti. Que estás ahí detrás. Que nos apoyas y que confías en nosotros. Porque lo nuestro no es cuestión de carrera, ni trabajo. Lo nuestro es cuestión de vida. Vida para la fiesta de los toros con los medios que tenemos. No sabemos vivir sin ella.

Felicidades a todos los que ponen un poco de sangre para que este cuerpo se mueva.

Fran Pérez @frantrapiotoros